3ª Carrera circuito Asics. Klayton. Ciudad del saber. Panamà City. Panamá

3ª Carrera circuito Asics. Klayton. Ciudad del saber. Panamà City. Panamà

Tras las experiencias sedentarias en Londres, Nueva York, Boston y Stuttgart llega otra carrera sedentaria internacional, así que inauguramos nombre en la sección.

Nunca hubiera imaginado que mi debut en carreras internacionales, se produciría a más de 9.000 kms. de distancia, y en centroamérica, concretamente en Panamá. Realizamos nuestras vacaciones en Perú, un circuito de 10 días, viendo lo principal del país, pero como los puntos Iberia plus no daban para el viaje a Lima, cogimos el trayecto hasta Panamá, y de allí ya saltamos a sudamérica. En Perú ni se me ocurrió ni entrenar ni buscar carreras, por lo de la altura, y porque ya teníamos contratado todo un circuito pero en Panamá íbamos por libre, y ahí empecé a investigar.

Llegábamos el día 14 a Panamá, y tras una noche de escala, continuamos a Perú. El 24 por la noche, regresábamos a Panamá, y en internet, veo que el 25 a las 7 de la mañana, había la carrera en Clayton, antígua base americana, donde se entrenaban las tropas que iban a Vietnam, por lo de aclimatarse en una zona de elevada humedad relativa, similar al sudeste asiático.

Las inscripciones en Panamá no se pueden hacer por internet. Solo presenciales. Envío mails a los organizadores, Corredores del Istmo, desde su presidente, hasta el último vocal. Me contesta al fin una persona, y me dice que sí que me pueden inscribir, pero que para recoger el dorsal debo de estar antes. Así que el 14, aprovechando mi escala, me presento en el centro comercial y me inscribo. Había carrera de 5 y de 10. Opto por la de 5, ya que estoy de vacaciones, y no era cuestión de machacarse, y el periodo de inactividad. Curiosamente vale lo mismo la inscripción a uno u otra, 20 dólares del ala, que con la diferencia de nivel de vida, es un pastón.

Viene una nueva complicación: la recogida de dorsales camiseta y chip, es del 22 al 24, cuando aún estoy en Perú. Así que el taxista que me lleva del hotel al centro comercial, le encargo que me vaya a buscar él el dorsal, y que me recoja el 24 por la noche, desde el aeropuerto, me lleve al hotel, y me entregue chip y dorsal. Billar a tres bandas, que increíblemente, sale bien.

El día de la carrera, instalado en un hotel cerca del canal, pero no sé si queda cerca o lejos la zona de salida. Despertador a las 6 de la mañana. Me asomo a la ventana y… un grupo de seis corredores haciendo ejercicios de calentamiento. Decididamente estoy cerca. Nos acercamos, preguntamos, y apenas estábamos a 500 metros de la salida. Un gran ambiente, unos 1.500 inscritos entre las dos distancias. Una especie de Zumba, para realizar estiramientos, con gran participación y muy divertida.

La carrera es lineal, con giros en «u», a los 2,5 o 5 kms., en función de la distancia a recorrer. Transcurre paralela al canal de Panamá. en una carretera muy frondosa (selva), en la que se corta el tráfico solo en el sentido de la marcha, no de cara. La carrera no es llana, viene con ondulaciones acusadas, que crean pequeños puertos, donde la gente se detiene. Salgo suave, a disfrutar, y enseguida veo corredores caminando. Miro mi reloj, y llevamos ¡3 minutos de carrera!. Increíble, nunca vía a nadie caminar a los 500 metros de la salida. El bochorno es increíble. Me comentan a la llegada, que lo normal en las carreras en Panamá, es salir a las 6,30, máximo a las 7. La maratón arranca a las 4 y media, y según ellos ya es tarde. Ves gente corriendo por la cinta costera a las 6 y a las 7, pero a las 8, ya son muy pocos los que se aventuran.

Gran cantidad de fotógrafos a lo largo de la carrera. Como 12 diferentes cuelgan sus fotos en FB. Otra cosa abundante son los avituallamientos líquidos durante la carrera. ¿sabéis cuantos había en 5 Kms.? Cinco, más una zona de esponjas, como si se tratara de un maratón. Además eran muy curiosos. Los llamaban cartuchitos, eran 10 onzas de agua mineral, (275 ml.). Como los antiguos champús. Solo un tubo de plástico cilíndrico, cerrado por las puntas. Es una manera muy «ecológica» de beber y refrescarse. A ver cuando tardan en llegar aquí. Además estaban en agua con hielo, y estaban fresquísimas. Demasiado para mí, por el gran contraste que producía, pero a la gente le gustaba así de fríos. Solo morder y a beber o refrescarse.

Acabando la carrera, empiezo a hablar con gente, para ver si consigo alguna camiseta chula de Panamá, a cambio de algunas que llevaba de aquí.

Me dicen que si no conozco a Fernando Revuelta, un español de 1,85, que seguro que lo veré.

Resulta que es una institución. Lo conoce todo el mundo. Es un atleta vallisoletano veterano, aunque joven aún, afincado en Panamá desde hace 14 años. Hizo séptimo en la carrera de 10, segundo en su categoría. Os adjunto link a su blog, donde tuvo a bién colgar una foto de nosotros a la meta.

En las fotos veréis algunas compis corredoras, y entenderéis porqué es interesante correr en Panamá. 

El de la banderita, es «Beby» Miró, presidente de Corredores del Itsmo. 

También veréis un corredor que no gasta en zapatillas, corre descalzo. Y tampoco creo que gasta en dorsales, al menos no se le ve…. 

En fin, una gran experiencia, en mi estreno internacional.