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Mitja de Sitges

No hay nervios por la carrera pero sí por la logística: dorsal y transporte. El día anterior tengo dos ofertas de dorsal, la de Peter, que ha tenido que volver a Inglaterra antes de lo previsto, y la de otro sedentario, Iñaki, que ha sido atacado por un virus típico de esta estación del año. Finalmente cojo el relevo de Iñaki. Las opciones para el traslado son coche propio, coche de amigos que corren los 10,5 km y tren. Estoy muy acostumbrada al coche, pero la posible dificultad del aparcamiento me hace descartarlo; el madrugón de ir con los colegas hace que me decida por el tren.

Domingo. Tren. Coincido con Alejandro y familia, y juntos vamos hasta el hotel donde se han alojado Iñaki, Eli y la sedentaria más joven.

Vamos bien de tiempo y estamos realmente muy cerca de la salida, así que con calma terminamos de prepararnos: geles, gafas, dorsales, etc. Al separarnos pronto para calentar no hubo la tradicional foto de grupo…Así que nos colocamos y allá vamos. Alejandro debe de estar en uno de los primeros cajones; imposible intentar verlo; además yo debo situarme más atrás. La salida se da con un par de minutos de retraso.

Alejandro en el segundo cajón
Reyes por el paseo marítimo

Hace un día radiante y sin viento. Pinta bien. Los primeros metros, aunque somos muchos, vamos cómodos porque el paseo marítimo es ancho. No presto demasiada atención al crono. De momento me interesan las sensaciones, sobre todo de mi tobillo, al que sometí al frío del hielo para que hoy no me dejara mal.

Km 2,5, Snow Patrol, a 5:20; creo que es un buen ritmo y voy cómoda, así que el objetivo es mantenerlo. Y así voy un rato. Me acelero con Chris Martin, lo cual intento controlar; aunque me va bien porque voy perdiendo tiempo en alguna subida y en los encierros que me hacen el engominado y el behobio (por cierto, se repetirán muchas veces).

Alejandro por delante en el 3K
Reyes con la música en el 3K

Muchos corredores van recortando en los giros, y pienso en el pobre Iñaki y lo poco que le gusta eso. Esta vez se lo ahorra. Me sorprende ver que no haya alfombra de control cerca de la urbanización Rocamar, y no me extrañaría que alguno se saltara parte de este tramo que, además, como son dos vueltas, puede incluso a animar a alguno a hacerlo la segunda vez… Sigo sin ver el sentido del engaño, pero la organización podría considerarlo para otras ediciones. En la carretera que bordea el golf sí que hay alfombra 🙂

Sigo a 5:20. Voy pensando en la segunda vuelta y de a partir de qué punto puedo aumentar el ritmo, si todo va bien. El 18 es una idea. Volvemos al centro de la ciudad y el público es bastante numeroso. Paso el km 10 algo por encima de 52’, así que debo llevar media por debajo de los 5:20, y estoy bien.
El fotógrafo oficial de los sedentarios apunta con el móvil… espero que los píxeles tengan piedad y disimulen los efectos del esfuerzo.

Alejandro completando la primera vuelta
Reyes completando la primera vuelta

Segunda vuelta; mucha menos aglomeración. Mantengo ritmo aunque alrededor del 13 veo unos preocupantes 5:30 que me cuesta superar, así que aprieto y supero. Luego Rihanna y Martin Solveig me ayudan a adelantar corredores.
La intención es bajar a 5:00 a partir del 16,5. No va a ser fácil pero es posible. Además, unas horas antes la declaración de intenciones ha sido cambiar menos kilómetros por mejor ritmo… ¡y una es mujer de palabra!
Los cálculos aproximados son 1:50… la verdad es que en estas condiciones no multiplico ni sumo muy bien. En cualquier caso no mejoro marca (BCN, 2009, 1:48:37).

En el 18 me fijo otra vez y he rascado tiempo al crono, ¿lo intento? Bajo a 4:45 y dejo de mirar la muñeca. Ahora ya se trata de darlo todo, teniendo en cuenta que 3 kms son muy largos. Corre, sólo corre y no aflojes. La gente anima más que antes, muchos son los mismos. Las calles son estrechas pero voy colándome y pasando a alguno que debe de tener muchas ganas de terminar.

Llegada de Alejandro

Y ya salimos al paseo, otra vez Iñaki, y más adelante Eva, Pili y Dani. Intento apretar los últimos 100 metros pero creo que las piernas me dicen que ya están dando bastante. Tiempo oficial: 1:47:40, MMP.
¿El premio? Además de haberlo disfrutado y compartido, un chocolate deshecho para merendar.

Reyes
El equipo de sedentarios

Y después de la carrera vino lo mejor…. Un servidor (Iñaki), que por una maldita faringitis tuvo que ver los 
toros desde la barrera, ofreció su habitación en el hotel Platjador (muy recomendable) como base de operaciones y para recuperarse con un magnifico baño en su piscina-spa de agua caliente… genial!
Alejandro e Iñaki con sus peques disfrutando del spa 🙂
Aprovecho también para dar la enhorabuena a Reyes por su MMP… se nota la preparación para la maratón de BCN y para destacar a Alejandro que pese a no tener buenas sensaciones a mitad de la carrera consiguió 1h27’30».
Iñaki
El equipo de sedentarios